
La nueva colección de esmaltes de Kiko está para comérsela. Su original acabado arenoso, que no es nuevo en esmaltes de la firma, con esos colores tan frescos nos recuerda que la primavera está al llegar. La colección edición limitada está compuesta por 10 tonos diferentes, a cual más jugoso y divertido. Una vez secos, los granos son perceptibles al tacto y crea un traje de color intenso en las uñas.
Kiko nos ofrece una carta bastante amplia, como decimos con 10 colores diferentes, que nos recuerda a las típicas cartas de cupcakes de algunas cafeterías especializadas en estos deliciosos pastelillos. Así, encontramos un esmalte cupcake pistacho, otro de fresa, otro de menta, otro de melocotón, así hasta la decena. Preciosos todos ellos, que van a pintar nuestras uñas durante toda la primavera y verano.
Otro punto positivo, su precio, ya que cuestan sólo 4,90 euros. Yo ya he anotado tres, aunque he de admitir que el efecto arenoso cansa un poco, quizá para las mañanas de abril…