
Si en 2008 nosotros tuvimos nuestro momento freak en Eurovisión con Rodolfo Chikilicuatre (ese personaje de parodia interpretado por el actor David Fernández que Buenafuente logró colar a TVE en las votaciones gracias al apoyo de unos espectadores que se tomaron a chufla la iniciativa), este año lo ha tenido Austria con Conchita Wurst. La diferencia de momentos freaks, es que España quedó muy mal parada ese año y Austria ha logrado vencer gracias a este personaje creado por Thomas Neuwirth.
Thomas Neuwirth como Conchita ha sabido ganarse al público por su torrente de voz, pero también por ser un activo luchador por los derechos de gays, lesbianas, transexuales y bisexuales, algo que lleva demostrando desde hace tiempo en redes sociales. Lo más anecdótico, es su aparición como mujer barbuda en el festival, que ha robado el completo protagonismo a su vestido de noche e incluso a sus ojazos, aunque seguro que más de una os habéis preguntado cómo los maquillará.
¿Queréis saberlo? lo explica él mismo en un vídeo tutorial.